El etíope Tedros Adhanom Ghebreyesus ha sido elegido director general de la Organización mundial de la salud (OMS) con ocasión de la 70ª asamblea anual en Ginebra. El doctor de 52 años, especialista del paludismo y antiguo ministro de la salud de Etiopía y después de asuntos exteriores, ha afirmado que la implementación de la cobertura sanitaria universal será la prioridad de la OMS en los próximos años. “Será el centro de gravedad de nuestra actividad. Es una cuestión de compromiso político. Existen varias opciones para conseguirlo. Lo importante es que los Estados lo logren. »
Entre los demás terrenos de trabajo, el doctor Tedros desea que la OMS apoye el refuerzo de las capacidades de los Estados a fin de responder más eficazmente a las epidemias y hace un llamamiento a la consolidación de la asistencia médica primaria y la lucha contra las enfermedades no transmisibles.
El nuevo director general tendrá numerosos desafíos a aceptar y el primero será consolidar una institución tambaleada tras la gestión criticada de la pandemia de gripe A en 2009-2010 y sobre todo la del Ébola de 2014-2016 que dejó más de 11.000 fallecidos, principalmente en el oeste de África. Pero también habrá que gestionar la influencia de los donantes de la OMS que tienen una voz importante en el capítulo de la política de la institución de Naciones Unidas, resistir al lobby de la industria farmacéutica y agroalimentaria y trabajar para hacer coincidir investigación médica/farmacéutica y necesidades de la población.
Sin embargo, el primer obstáculo en el camino del nuevo Director General serán las acusaciones de complicidad en la represión por el gobierno etíope de un movimiento de protesta en el país en 2016 que tal vez se cobró la vida de 600 personas cuando Tedros era ministro de asuntos exteriores.